Nos visitan del mundo




















































domingo, 29 de agosto de 2010
Entre judíos te veas
sábado, 21 de agosto de 2010
Entre comunistas te veas (III y último)
El Pos 68 fue el intento del gobierno por regresar al control a los estudiantes y los grupos de choque fueron un recurso. Yo cursé en la primera preparatoria de la UNAM dónde los porros fueron expulsados por la alianza entre las autoridades y sus estudiantes. Cerraron la cafetería y expulsaron a los alumnos que ejercían estas prácticas, en 1969, tras el regreso a clases se suscitaron los últimos enfrentamientos y los porros fueron expulsados. En estos acontecimientos tuvieron papel destacado los miembros del Comité de Lucha de la Prepa 6 que vieron quemado su local por un ataque porril, a Enrique Espinoza Suñer "sólo" le tiraron los dientes de un batazo.
Así a pesar de que no había porros en Prepa 6, los porros siguieron latentes de dos formas. Llegaban de la Prepa 5, dónde los grupos porriles querían re colonizar la 6 o directores posteriores quisieron cobijar grupos que los protegieran. Como era muy impopular que lo hicieran abierto, los disfrazaron de grupos "culturales" o "deportivos".
Como he reseñado cuando ingresé al Bachillerato era más bien un católico remojado en una tradición renovadora proveniente del Vaticano II y cercano aunque no militante al Movimiento Familiar Cristiano. Un día en los años 70 vinieron porros de la Prepa 5 en camiones a amedrentarnos, yo no estuve, pero me relataron la escena de decenas de estudiantes huyendo de la agresión porril por las bardas tras la Prepa 6. Los únicos que se organizaron para evitar agresiones fueron los miembros del Comité de Lucha. Estudiantes no comunistas, cristianos, independientes nos organizamos con ellos. Mecanismos de alerta y autodefensa, organización de los estudiantes fueron la respuesta a las posibles agresiones.
En los grupos en que nos dividimos crearon la Brigada San José, estudiantes comunistas de tendencia maoísta y algunos cristianos que deambulábamos en este esfuerzo. Así que en términos de organización llegamos al primer consenso con los comunistas, ellos le decían San José por José Stalin y nosotros le decíamos San José por el padre de Jesucristo. La verdad como adolescentes nos pareció muy divertido este "consenso".
Así que decidí al principio mantenerme independiente, preservé mi cristianismo, pero mis ligas con mis amigos maoístas fortalecieron mi conocimiento sobre China, sobre la Revolución cultural, sobre el planteamiento de la Nueva Democracia. El Partido Comunista en ese momento mantenía una posición de participar en los órganos de gobierno de las escuelas, lo que en la perspectiva estudiantil era más bien una posición reformista. Así que mi admiración a lo que sucedía en China (A través de Pekin informa), las personas que pertenecían en ese momento al PCM en Prepa 6 y los maoístas que se convirtieron en mis amigos, aunado al dogmatismo pro soviético del PC, terminaron por influir en la decisión de no ingresar al PCM como militante y quedar como estudiante independiente, tal y como lo había hecho desde un primer momento.

Más adelante pude hacer una crítica al maoísmo sin dejar de ver en él un movimiento antifeudal y de superación de economías pre capitalistas muy interesante. El maoísmo tiene una gran capacidad de organización y trabajo popular entre las masas. Aprendí mucho de ellos, pero el programa que proponen terminó por no convencerme. En la medida en que seguí estudiando el maoísmo, mi "maoísmo" estudiantil ligado sobre todo a amistades y simpatías cedió paso por tener mejores herramientas para el análisis social.
Lo curioso es que tengo amigos en el PC y amigos que fueron militantes maoístas muy comprometidos. Los comunistas no fueron tan amenazantes ni tan peligrosos como lo decía la ultra derecha. En realidad son un punto de vista y en consecuencia tienen una acción concreta en la realidad de acuerdo a su filosofía. Satanizarlos o combatirlos en realidad es algo que no entiendo, lo único que puedo comprender es que quienes lo hacen no los conocen.
(1) Talonear viene del slang o kaló mexicano. Se aplica a las mujeres que piden dinero en la calle, las prostitutas talonean. Entre los estudiantes se aplicaba a la acción de los porros de pedirte dinero. Todo el primer año, te quitaban el dinero.
domingo, 15 de agosto de 2010
Entre comunistas te veas (II)
Cuando era niño, mi comunidad, la sociedad en la que vivía era profundamente conservadora. La palabra comunismo o comunista no se presentó sino a finales de los años 60, cuando la vi en una publicación de corte anticomunista que emitía una de las tantas "organizaciones sociales" de la Iglesia católica. Unas caricaturas dónde hablaba que en Rusia o en Cuba estaba como encerrados todos. Mi primera impresión fue tragarme todo ese planteamiento y rechazar una ideología que significaba la idea que se me sugería, la esclavitud de las personas.
Yo viví en la prensa 1968, era un niño como de la edad de Kevin ARNOLD el personaje de "Los años maravillosos". Las imágenes de jóvenes atacados, golpeados por la policía, marcó como no tienen idea mi percepción de lo que era el gobierno en México y su autoritarismo "democrático". ¿Por qué los soldados golpeaban a los jóvenes? Jóvenes que eran exáctamente como mis hermanos mayores, como mis vecinos, muchachos de pelo largo que sólo se divertían, que me eran simpáticos. ¿por qué?
Mi comunidad barrial tenía fuerte influencia del movimiento familiar cristiano y de los misioneros del Espíritu Santo. A ellos acudían los estudiantes para que se dijeran misas por los muertos y por los presos. ¿Muertos? ¿Presos? Comencé a definir aquello que la canción minera socialista norteamericana decía ¿Y tú con quién estas? Así que si bien rechazaba a los "comunistas", lo cierto es que mis ojos de niño no dejaban de ver lo que pasaba en el mundo.
Al pasar a la educación media, - en México esta educación se divide en dos Media básica (que le llaman secundaria) y Media Superior (que le llaman bachillerato) - no sólo cambie de escuela, cambie de barrio y por lo tanto de comunidad. Tuve nuevos amigos, nuevas personas en un mundo diferente aunque básicamente en el mismo sector social de clase.
Aquí fue dónde por primera vez conocí a los "temidos" comunistas. Y no eran precisamente la gente mala y perniciosa que habían dibujado en las publicaciones que leí en mi niñez. Eran básicamente hijos de trabajadores que mantenían convicciones particulares sobre la pobreza, sobre lo que significaba el mundo del trabajo y su oposición al gobierno autoritario que teníamos en México. No eran precisamente gente excepcional, sino más bien gente común cuya diferencia era que leía, que se preocupaba por la ciencia y la cultura, por las tradiciones. Lo único que no tenía en común, era que no eran católicos, pero ello no obstara para convivir, para jugar con ellos, pues al fin y al cabo eran chamacos como yo.
Al comentar sobre la "prisión" rusa o cubana, con mucha paciencia me respondieron prestándome textos en los que conocí el otro extremo, la Unión Soviética, Cuba, China. Muy complicados para mi edad, estoy hablando de aproximadamente 13 años, no entendía bien lo que decían. Leí a RIUS, Eduardo del Río el que por cierto vivía no hacía tiempo en la misma zona y de la que los vecinos rumoraban había venido en más de una ocasión a molestarle la policía. No alcancé su época de Los Supermachos, más bien me tocó la segunda época con Los agachados. Eran revistas cómicas que en realidad me divertían mucho. Sus personajes como el reuter Nopalzin, Don Ruco, Trastupijes y otros me hacían reír, además de que enseñaron lo que habían sido muchas cosas de las que ignoraba sobre la realidad del país.
Si bien, no me sentía comunista, ya no podía tener una aversión por personas que vivían en mi comunidad, que eran realmente como todos nosotros, que estudiaban en la misma escuela, que compartían los mismo juegos y cuya diferencia era sobre todo un discurso en el que señalaban verdades, el autoritarismo del gobierno mexicano priísta, el que en mi niñez había presenciado como golpeaba estudiantes.
Que eran contrarios a los gringos, que eran antimperialistas. Por favor, ese no es ningún pecado, para los mexicanos, los norteamericanos han sido siempre una potencia abusiva en contra de todos nosotros. ¿Así que cuáles eran las objeciones a los comunistas? ¿Qué no comulgaban con los gringos?, ¿Qué se oponían al gobierno?, ¿Qué señalaban que a pesar de que nosotros estábamos acomodados, había muchos muchachos como nosotros que no podían seguir estudiando por su pobreza y por estar marginados?
No creían en Dios ¿Sí y qué? Eran iguales a nosotros en la comunidad, sólo pensaban diferente, leían la URSS informa, en la que se decía exactamente lo contrario a las prisiones colectivas que nos pintaban los periódicos que llegaban a la casa impulsados por organizaciones como los Caballeros de Colón.
Aún después de muchos años he conocido no sólo a los padres de mis amigos, maestra normalista y electricista de la tendencia democrática del SUTERM, he conocido a sus hermanos y hermanas, brillantes y comprometidos profesionistas que terminaron con muy buenas calificaciones sus carreras y que inciden en la realidad de sus profesiones. Médicos, pedagogas, psicólogas, economistas con estudios en el extranjero, becados, porque todos ellos mantuvieron excelentes calificaciones. Todos ellos querios y acogidos por la comunidad, he conocido a sus hijos y quizás algún día conozca a sus nietos.
Así que fuera de lo que decían estas revistas que lanzaban a los comunistas como agentes externos a las comunidades, el comunismo, siempre me lo ha parecido, es un conjunto de ideas paradigmáticas en torno a la realidad social. A diferencia de los periodicuchos de la ultra derecha, ellos si están en las comunidades y tienen un elemento que jamás les vi a los otros. Dialogan, discuten, entran en controversia y se comprometen con problemas que son generalmente comunes a la sociedad. En la siguiente entrega le comentaré porqué decliné la decisión de entrar al Partido Comunista Mexicano, a pesar de que muchos de mis conocido e incluso amigos pertenecieron a él
domingo, 1 de agosto de 2010
Entre comunistas te veas (I)
Así que al confiar en que usted rescató con exactitud las frases de José Saramago, la parafraseo a usted sobre Saramago:
Giordano...se preguntará a que se debe mi inesperada visita. Le responderé con una pregunta: ¿Escribirá usted algo acerca de JOSE SARAMAGO? Comunista, hijo de campesinos analfabetos, Hombre que se construyó a sí mismo y un gran ateo que, para variar, nos enseñó mucho acerca de Dios y la Responsabilidad del Hombre para consigo mismo. Nos dijo en pocas palabras: la ética es suficiente para ser buena persona, no usen el nombre de Dios como excusa. "Dios es el silencio del Universo, y el hombre, el grito que da sentido a dicho silencio"